El colmo de la mala suerte

 

A pesar de la derrota, el Depor aún mantiene cuatro puntos de ventaja sobre los puestos de decenso

 

DEPORTIVO GUADALAJARA: Saizar; Antonio Moreno (Arriaga 59´), Jorge, David Fernández, Barral; Javi Soria, Gerard Badía (Rodri 46´), Nico; Iván Moreno (Jonan 62´), Ernesto y Aníbal.

VILLARREAL B: Mariño; Jaume Costa, Kiko, Truyols, Pablo Iñiguez (Pere 10´); Llorente, Toribio, Moi Gómez, Trigueros (Pedro Vázquez 81´); Lucas Porcar (Toño 67´) y Joselu.

GOLES: 0-1. Min. 40. Moi Gómez. 0-2. Min. 69. David Fernández (en p.p.).

ÁRBITRO: Valdés Aller (Colegio Castellano-Leonés). Auxiliado en las bandas por Vallés Mazariegos y Ortega Nájera (Colegio Castellano-Leonés). Amonestó a Antonio Moreno, por el Depor, y a Pablo Iñíguez, Pere y Llorente, por el Villarreal B.

INCIDENCIAS: Encuentro de la 26ª jornada de la Liga Adelante, disputado en el Pedro Escartín ante unos 3.000 espectadores. Ryan, por lesión, Collado, por sanción, además de Oya, Víctor Fernández y Gago no entraron en la convocatoria.

 

El Deportivo no está teniendo suerte en 2012. Los morados volvieron a perder en el Pedro Escartín en un partido donde la fortuna fue esquiva a sus intereses. Lo hizo ante el Villarreal B por 0-2, rival que también pelea por mantener la categoría en un partido plagado, una vez más de adversidades. Primero porque Ernesto falló un penalti en el minuto 7 que pudo cambiar el signo del encuentro; segundo porque a Barral se le anuló un gol aparentemente legal mediada la primera mitad; tercero porque el Villarreal B se adelantó en el marcador al filo del descanso en uno de los escasos errores defensivos que había tenido el Depor hasta el momento; cuarto porque en la segunda parte David Fernández cogió a contrapié a Saizar en una cesión aparentemente sin complicaciones para que el Villarreal B marcara el 0-2 y quinto, porque el capitán Jorge tuvo que retirarse en camilla, lesionado a diez minutos para el final y el Depor tuvo que jugar los últimos minutos en inferioridad porque Carlos Terrazas ya había agotado todos los cambios.

Pero a pesar de esta nueva derrota, de todos estos contratiempos, los morados aún tienen cuatro puntos de margen sobre los puestos de descenso, que deben defender con uñas y dientes en el próximo duelo en Cartagena.

 

El Depor perdona; el Villarreal B, no

Con la inclusión de Nico en el equipo titular por primera vez desde que se incorporó en enero, el Depor inició el encuentro con bastante intensidad en su juego aunque los primeros minutos transcurrieron igualados porque el Villarreal B quiso adueñarse del balón. No obstante, los morados tuvieron una oportunidad de oro para romper la igualdad inicial con un penalti que provocó Aníbal en el minuto 7. Ernesto se encargó de lanzarlo pero en esta ocasión, el ‘héroe de Anduva’, erró el lanzamiento, siendo despejado por Mariño.

A pesar de este nuevo varapalo, el Depor fue tomando el mando del encuentro, presionando muy fuerte y muy arriba en la salida del balón del Villarreal B, lo que le permitió recuperar rápidamente la posesión del esférico, provocando que los jóvenes del filial del Villarreal vieran la portería de Saizar muy lejana. Los morados no dejaron de crear peligro en el área del Villarreal B con especial protagonismo para Ernesto. Así, en el minuto 13, el ‘11’ morado centró desde la banda izquierda al punto de penalti donde se encontraba Nico aunque la anticipación del defensa del filial amarillo hizo que el balón se marchara a corner.

Rondando el minuto 20, el Depor gozó de otras dos ocasiones más a balón parado. Dos faltas laterales botadas por Ernesto terminaron siendo rematadas por Barral de cabeza. La primera se marchó desviada y la segunda, dentro de la portería del Villarreal B, pero el gol no fue válido porque el árbitro entendió que Barral estaba en fuera de juego, decisión muy protestada por la afición del Pedro Escartín.

El marcador seguía inalterable pero el dominio era del Deportivo, que estaba muy bien posicionado en el césped y que, con su presión, maniataba al Villarreal B, que, no obstante, cuando tenía oportunidad de salir a la contra lo hacía con mucho peligro y obligaba al rápido repliegue de los morados.

En el último cuarto de hora de la primera mitad, el partido volvió a equilibrarse y el Villarreal B obligó aún más a los morados al trabajo defensivo cerca de la portería de Saizar. El Depor había perdonado el gol en demasiadas ocasiones en la primera mitad, con lo que la máxima del fútbol se cumplió una vez más y los morados lo acabaron pagando encajando el 0-1 en el minuto 40, de nuevo en una concatenación de fallos de la defensa morada, que permitió que el balón pasara por el área con facilidad, llegándole a Moi Gómez, quien no perdonó, batiendo por bajo a Saizar dentro del área.

 

Tímida reacción y sentencia

El gol, al filo del descanso, dejó muy tocado a los jugadores del Deportivo. No obstante, el paso por los vestuarios fue la mejor medicina para los de Terrazas porque nada más saltar al campo echaron el resto para remontar un partido que se había puesto cuesta arriba. Terrazas optó por dejar en la caseta a Gerard Badía y dar paso a Rodri y el Depor salió decidido a por el empate desde los primeros compases de la segunda mitad, volviendo a presionar con intensidad.

Pero con el paso de los minutos y viendo que el marcador permanecía en contra, los morados comenzaron a incurrir en la precipitación y los nervios afloraron para un equipo al que le costaba bastante combinar con fluidez.

Así, y con media hora aún por delante, Terrazas agotó todos los cambios, utilizando todo su poderío ofensivo, dejando una defensa de tres y dando paso a Arriaga y a Jonan en lugar de Antonio Moreno e Iván Moreno. El Depor asedió al filial amarillo en la última media hora, pero el Villarreal B renunció al ataque, fortaleciendo su línea defensa, lo que provocaba grandes dificultades a los morados para finalizar las jugadas.

Para colmo de mala suerte, en el minuto 69, el Depor quedó totalmente noqueado tras un error de David Fernández, que se equivocó en la cesión a Saizar, en un balón aparentemente muy controlado para él pero cogiendo a contrapié al portero morado, que nada pudo hacer para evitar el 0-2.

Al Depor todavía le quedaban 20 minutos por delante para hacer el más difícil todavía. Los morados se volcaron totalmente hacia la portería del Villarreal B pero los visitantes estuvieron muy seguros en su línea defensiva.

Y para finalizar con un aciago partido, el capitán Jorge cayó lesionado en el minuto 78, con ostensibles gestos de dolor en su rodilla, saliendo retirado en camilla. Al estar agotados todos los cambios, el Deportivo tuvo que buscar la remontada en los últimos diez minutos con diez jugadores sobre el césped. Lo intentó hasta el final pero con más corazón que cabeza, sin verdadero peligro.